El 22 de abril se efectuó el simulacro táctico combinado de contraataque nuclear en el que participaron por primera vez los supergrandes lanzacohetes reactivos autopropulsados de calibre 600 mm de la República Popular Democrática de Corea. Cargados de ojivas nucleares simuladas, los proyectiles se lanzaron simultáneamente y acertaron el blanco en una isla a distancia de 352 km como las balas disparadas de los fusiles de los francotiradores.
La presente maniobra es una señal de advertencia evidente a los provocativos ejercicios conjuntos de las escuadras combinadas que se realizan del 12 al 26 de abril por la República de Corea y Estados Unidos movilizando más de 100 aviones de todo tipo en la base aérea de Kunsan de la primera.
El lanzacohetes de calibre 600 mm es una superpotente arma, única de su tipo en el mundo. Es un medio de ataque táctico nuclear tan poderoso que con una pieza con 4 proyectiles se puede destruir completamente un aeropuerto operacional del enemigo. Si fue un combate real, los aviones de Estados Unidos y de la República de Corea se habrían destruidos lejos de pensar en el despegue.
