Corea, potencia soberana y su presidente Kim Il Sung

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La RPD de Corea no es grande en su dimensión, pero bien conocida en el
mundo como una potencia soberana, independiente y autodefensiva. Desde su fundación hasta la fecha, ha mantenido con firmeza su soberanía nacional y defiende en todas sus actividades estatales sus intereses nacionales, sin prestar ojo a la actitud de los otros.

Hoy también cuando todo se decide por las fuerzas y arbitrariedades de las
potencias grandes, Corea habla en voz alta sus opiniones y defiende su dignidad nacional con sus propias fuerzas militares. Pequeña en dimensión, pero poderosa, Corea es el modelo de los países que desean la soberanía nacional.

La realidad de Corea de hoy, potencia soberana, independiente y
autodefensiva es inconocible al margen de los méritos de su fundador, Presidente Kim Il Sung, quien bajo la bandera de la independencia concibió la Idea Juche y la definió como el camino eterno a seguir en la construcción y desarrollo del país.

La independencia es la aspiración política de toda la vida del Presidente
Kim Il Sung. Cuando Corea estaba bajo la ocupación militar de Japón, Kim Il Sung presentó la línea de liberarla con las propias fuerzas de la nación coreana, unió a todos los coreanos y desplegó la ardua lucha armada de 20 años; por fin logró la liberación nacional.

Después de la liberación, en el ambiente histórico del mundo en que éste se
dividió entre Este y Oeste que salieron a la aguda confrontación político-militar, el presidente Kim Il Sung inició el camino hacia el socialismo, pero nunca siguió ciegamente a la Unión Soviética.

Basando en la Idea Juche, siempre defendía los principios y mantenía líneas
independientes. Dijo, como hemos liberado el país con las fuerzas nacionales
debemos construir el nuevo país apoyándonos en nuestro pueblo; esto era la
convicción y voluntad invariable del Presidente.

Con tal firme convicción, el presidente resolvía todos los problemas presentados en la construcción de la nueva patria en bien de los intereses
nacionales y conforme a la realidad de Corea, y así, realizó con éxito la causa de la fundación del partido, el estado y el ejército.

He aquí un episodio al respecto.

En aquellos tiempos después de la liberación, algunos diplomáticos de una
«potencia amiga»; opusieron la línea del Partido del Trabajo de Corea como la de nacionalización industrial, reforma monetaria y la preparación del ejército regular.

El presidente les dijo claramente que resolver todos los problemas según
sus propias decisiones y conforme a la realidad del país y las exigencias del
pueblo coreano era el único principio justo y confirmó que construiría con
nuestras propias fuerzas un país soberano independiente.

Junto con la soberanía en la política, la independencia económica y la
autodefensa son los principios principales que deciden el modo de existencia y
método de desarrollo de Corea. El presidendte Kim Il Sung no se unió a los demás países socialistas que ingresaron en CAME (Consejo de Ayuda Mutua Económica), establecido por la iniciativa de la Unión Soviética, sino que construyó una economía autodependiente.

Cuando los chovinistas de gran potencia opusieron la línea principal de la
construcción económica socialista de Corea, de dar prioridad al desarrollo de la
economía pesada desarrollando simultáneamente la industria ligera y la
agricultura y forzaron sus peticiones injustas, las rechazó tajantemente.
Se podría decir un milagro lo que el Ejército Popular de Corea, en menos de
dos años de fundado, rechazó la invasión militar del imperialismo y sus aliados y ganó la victoria gloriosa en la guerra coreana (1950-1953), así como hoy
garantiza con seguridad la dignidad y honor de la nación con su poderío militar.

Tal milagro también no puede imaginarse al margen de la línea militar de
autodefensa planteada por el presidente Kim Il Sung. En aquellos tiempos del siglo pasado, algunos países socialistas no dedicaban importancia a la preparación militar mirando a las potencias grandes.

Pero el presidente alzó la bandera de la autodefensa, construyó poderosa
industria defensiva e intensificó invencible el Ejército Popular de Corea, así
asestaba golpes demoledores a los invasores que intentaron quitar la dignidad de Corea. En realidad, el presidente Kim Il Sung es el gran fundador de Corea
socialista jucheana, brillante por su independencia.

Esta independencia que el presidente Kim Il Sung mantenía y realizaba en
toda su vida, es la confianza invariable, modo y práctica revolucionarios del
Presidente del Comtié de la Defensa Nacional de la República Popular
Democrática de Corea, el camarada Kim Jong Il. Él presentó las consignas como «La ideología, la tecnología y la cultura, todas a la manera Jucheana¡» «¡Vivamos a nuestro estilo» y dirigió enérgicamente la revolución coreana por la via de la independencia.

A fines del siglo pasado, cuando a escala mundial el socialismo se
desmoronaba y las fuerzas aliadas imperialistas concentraban su ofensiva contra Corea, ella sostenía invariablemente su camino hacia el socialismo, lo cual fue merced a la línea de independencia presentada por el Presidente Kim Il Sung y mantenida firmemente por el Presidente Kim Jong Il.

Hoy la historia victoriosa de la RPDC se continúa con el Máximo Dirigente Kim Jong Un, otro gran Hombre sin par. Teniendo al Máximo Dirigente Kim Jong Un quien ostenta en alto la dignidad y el espíritu de la Corea de Juche, ésta se quedará para siempre como una fortaleza soberana, una potencia invencible y digna.

*El autor es secretario general del Instituto Ecuatoriano por la Reunificación Pacífica e Independiente de Corea.

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