
En octubre pasado Kim Jong Un, Presidente de Asuntos Estatales de la RPD de Corea, inspeccionó las bases de misiles estratégicos, ocasión en que enfatizó que las fuerzas armadas de misiles estratégicos constituyen lo grueso de la capacidad disuasiva de guerra y que la modernización técnica del conjunto de fuerzas armadas del país con la prioridad de ellas es un principio importante de la estrategia de la construcción de defensa nacional que el Partido del Trabajo de Corea sostiene invariablemente.
Especialistas comentan que su inspección se realizó para reforzar la capacidad disuasiva de guerra y hacer los preparativos de reacción cabal de las fuerzas armadas nucleares. El 31 de octubre, bajo su dirección fue lanzado exitosamente el misil balístico intercontinental “Hwasongpho-19”.
Como es bien consabido, pese al chantaje nuclear y las sanciones de las fuerzas hostiles, la Corea socialista ha logrado éxitos asombrosos en la industria y el sector científico de defensa nacional. En los últimos contados años ella poseyó todas las armas poderosas que monopolizaban otras potencias nucleares y desarrolló nuevos sistemas de armamento, desconocidos en el mundo.
En los últimos cuatro años hizo exitosamente los lanzamientos de prueba del proyectil teledirigido táctico, el misil crucero de largo alcance, el misil antiaéreo, el misil hipersónico, el misil balístico intercontinental “Hwasongpho-18”.
Específicamente fueron ya desarrolladas las ojivas nucleares para misiles de mediano alcance e intercontinentales. También fueron desarrollados y ensayados distintos transportadores de misiles de corto alcance. Los lanzacohetes autopropulsados de 600 mm de calibre, los misiles balísticos y cruceros para lanzamiento submarino y la lancha de ataque submarino nuclear teledirigida son armamentos que poseen solo unos países o desconocidos en el mundo hasta la fecha.