Los pasados días 24 y 25, el estimado compañero Kim Jong Un, Secretario
General del Partido del Trabajo de Corea y Presidente de Asuntos Estatales de la
República Popular Democrática de Corea, dirigió sobre el terreno las obras de
construcción de varias fábricas de la industria local.
Le acompañaron los cuadros del CC del PTC, Jo Yong Won, Pak Jong Chon,
Kim Jae Ryong, Pak Thae Song, O Su Yong, Ju Chang Il, Kim Chol Sam y Kim
Hwa Song.
Kim Jong Un fue recibido in situ por los comandantes de las unidades del
Ejército Popular movilizadas para la construcción.
Viendo el plano de distribución y reforestación de fábricas de la industria local,
escuchó el parte de los comandantes sobre la marcha de la construcción y la
comprobó recorriendo las obras.
Me parece que fue ayer cuando apreté el botón de la voladura para el inicio de
esta obra que anuncia una nueva época del desarrollo local, pero las fábricas ya
ostentan su aspecto magnífico, dijo con satisfacción y calificó de formidable el
hecho de que en todos los lugares de la construcción hayan cumplido las tareas en
más de 80%.
Evaluó la calidad de la obra averiguando minuciosamente si se cumplieron los
requisitos de la planificación del proceso que permite el buen funcionamiento de los
equipos y la máxima eficacia de trabajo y producción, si las paredes garantizan
cabalmente el mantenimiento del calor y están revestidas de azulejos de modo
intachable.
Jamás deben menospreciar el mejoramiento de la calidad, una demanda política,
dándose prisa para terminar la construcción lo más pronto posible, instruyó.
El Partido prometió al pueblo levantar esas fábricas y el Ejército Popular
decidió regalárselas y, por lo tanto, hay que construirlas de manera que sean
intachables por muchos años, señaló y subrayó la necesidad de que los comandantes
de las unidades in situ y los órganos de supervisión de la construcción sean más
exigentes y eleven su papel.
Observando largos ratos cómo trabajaban los militares, sugirió mejorar sus
condiciones de trabajo y vida e intensificar la propaganda política y agitación
económica como las que se realizan en las trincheras para movilizar su fuerza
espiritual.
A las organizaciones del Partido en provincias, ciudades y distritos y los comités
populares de distintos niveles les recomendó realizar de manera hacendosa y desde
la posición de dueño los preparativos como el acondicionamiento de bases de
materias primas y la formación de obreros calificados, de modo que las plantas
puedan funcionar plenamente tan pronto como se construyan y aportar beneficios a
los habitantes.
Tras lanzar la nueva orientación de acelerar la histórica causa de la prosperidad
local al simultanear la construcción de instalaciones de salud pública, centros de
divulgación de ciencias y tecnologías y establecimientos de administración de
cereales con la de plantas de la industria local para impulsar enérgicamente el
cumplimiento de la política 20×10 para el desarrollo local presentada por el Partido
y que persigue el objetivo de producir cambios evidentes en el desarrollo de la
economía local y el mejoramiento de la vida de la población, expuso la intención del
CC del Partido de tomar medidas importantes para ese fin.
Con el fin de abrir cuanto antes y de modo simultáneo la nueva época del
desarrollo trascendental y prosperidad integral de las localidades, el Partido toma
esta decisión importante, muy difícil de tomar en los momentos críticos como hoy,
pero que tiene que tomar sin falta, señaló.
Apuntó que lo más conveniente era aprovechar la movilización de las unidades
del Ejército Popular en la construcción de plantas de la industria local en distintas
zonas para construir también las bases de divulgación de ciencias y tecnología,
levantar primero el armazón de los establecimientos de salud pública y de
administración de cereales que serán construidos por completo según las medidas
ulteriores adoptadas por el Estado año tras año, y lograr su puesta en funcionamiento
tan pronto como se inauguren.
Se presenta como tarea indispensable, que debe ser cumplida sin falta, fomentar
la salud pública de los habitantes locales al construir excelentemente los hospitales
desarrollados de gran dimensión en las ciudades y distritos regionales donde el nivel
de modernización de las instalaciones sanitarias es más bajo que el de las urbes,
acotó.
Para cumplir esa tarea colosal, hay que priorizar la construcción de edificios
ajustándola al cronograma de la edificación de plantas de la industria local y tomar
las medidas para dotarlas con los equipos según el plan posterior del Estado, detalló.
Al destacar la necesidad de levantar los centros de divulgación de ciencias y
tecnologías, precisó que lo que se propone en la urbanización del campo no es la
imitación meramente arquitectónica y estética, sino convertir cuanto antes a los del
campo en progresistas, obreros y talentos científicos y técnicos.
Como vía práctica para ello, hace falta establecer en cada ciudad y distrito un
«centro de divulgación de ciencias y tecnología» destinado a difundir los
conocimientos necesarios de varios dominios, acotó y prosiguió que esta es una
labor importante que también concuerda con la política del Partido de construir un
Estado que se desarrolla a fuerza de las ciencias y tecnologías.
Instruyó establecer el concepto de «centro de administración de cereales» como
nombre común de varias instalaciones de procesamiento y conservación de granos.
Continuó diciendo que se debe construirlas nuevamente bajo la responsabilidad
del Estado, abandonando la actitud pasiva de reparar las existentes, para así
conservar sin pérdida alguna los cereales cosechados con mucho trabajo y
suministrar a los habitantes los alimentos procesados con calidad.
Puesto que se desarrolla en gran escala la construcción de fábricas de la
industria local en todo el país, se ha establecido un sistema relativamente ordenado
de aseguramiento de las fuerzas y materiales de construcción y de su mando, recordó
y volvió a expresar la seguridad de que desde el punto de vista del tiempo y la
rentabilidad sería la mejor opción que cada ciudad y distrito impulse
simultáneamente en esta oportunidad la construcción de modernos hospitales, bases
de divulgación de ciencias y técnicas y centros de administración de cereales.
Acentuó que la política del desarrollo local puede hacer aportes reales a la
mejoría de la vida material y cultural de los pobladores locales y agrandar
trascendentalmente la eficacia del progreso de las localidades, cuando abarque la
salud pública, la ciencia y la educación, sin limitarse a la construcción de plantas de
la industria ligera.
Señaló que si bien las ciudades y distritos no tienen fuerzas sobrantes porque a
sus equipos de construcción les cuesta mucho trabajo la mera tarea de reconstruir
todas las viviendas, pero si por esa razón desatienden las labores indispensables, el
sueño de la prosperidad local no pasará de ser una consigna huera.
El PTC tomó esta audaz decisión confiando en el Ejército Popular que es
defensor, partidario y ejecutor consecuente de la política del Partido, forjador de la
civilización de la nueva época y creador de la felicidad del pueblo, subrayó y
presentó vías concretas que les permiten a las unidades movilizadas en la
construcción de fábricas de la industria local cumplir las nuevas tareas que asumen
al formar y distribuir bien la mano de obra y elaborar con esmero el programa de la
obra.
Sugirió a los directivos de las ramas correspondientes que estudiaran
profundamente los planes detallados de la meta decenal del desarrollo local, que hoy
es más alta, y las maneras de su cumplimiento, y los discutieran, analizaran y
aprobaran en la sesión plenaria de diciembre y los ejecutaran sustancialmente año
tras año.
Aunque son colosales las tareas y difíciles las condiciones, podemos realizar sin
falta nuestro ideal si trabajamos con más empeño, afirmó y añadió que asumir una
misión difícil en los momentos difíciles es una cualidad típica de los revolucionarios
coreanos.
Diez años después cuando se alcancen esas metas, las localidades y las zonas
rurales se metamorfosearán literalmente sacudiéndose del atraso secular y también
se cambiará de modo irreconocible el aspecto de nuestro Estado, apuntó y convocó a
todos a encontrar el orgullo de hacer la revolución y sobreponerse a las dificultades
de hoy imaginando cómo sería ese futuro.
Expresó la convicción de que resultarán fructíferos sin falta los magnos
proyectos que marcarán un hito importante para acelerar el proceso de la
prosperidad local.
Su visita a los lugares de construcción de las fábricas de la industria local se
registrará en los anales como ocasión importante en que se prepararon una guía
programática y una bandera combativa que enriquezcan la política 20×10 para el
desarrollo local, conduciéndola a una etapa superior, y como otro evento político de
gran trascendencia en la dirección del PTC, muy fiel a su misión inicial de plasmar
en su política y llevar a la práctica el deseo y la exigencia del pueblo.
ACNC